2024-07-07 12:00:00
El impuesto de la renta (IRPF), cuyo periodo de declaración acaba de finalizar el pasado 1 de julio, es uno de los pilares que sustentan el sistema fiscal español, con unos 24 millones de declarantes, de los que más de 20 millones son declaraciones individuales y el resto, conjuntas. El grueso son especialmente, asalariados, aunque también se incluyen las rentas mobiliarias e inmobiliarias y las ganancias patrimoniales (plusvalías).
Un informe de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) revela el impulso que la inflación supuso para la recaudación el año pasado. El IRPF tuvo su protagonismo por el tipo medio, que se incrementó como consecuencia de la subida de las retribuciones medias y supuso una aportación del 19% al crecimiento de los ingresos. De hecho, el año pasado, el aumento del nivel general de precios supuso 3,6 puntos del incremento del 6,4% de la recaudación total por impuestos, una tendencia que ya se notó en 2022 y que, según la Airef, en 2024 “volverá a ser el principal impulsor de los ingresos, aunque algo menos que en 2023”.
La contribución por territorios es desigual, dada la estructura poblacional y económica del país. Y lo revela el último informe sobre el impuesto en 2022, publicado por la Agencia Tributaria. Andalucía es la comunidad con un mayor numero de declaraciones, con 4.092.833, según ese análisis. Esta cantidad supuso el 17,87% del total. Le seguía Catalunya, con 3.993.108, el 17,44% del total; la Comunitat Valenciana, con 2.585.372, con el 11,29% del total; y Galicia, con 1.423.911, el 6,22% del total. De las comunidades de régimen común, sin incluir las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, la autonomía con menor número de declarantes fue La Rioja, con 179.184, el 0,78% del total; con Cantabria, con 311.959, con el 1,36% del total y Extremadura, con 520.184, el 2,27% del total, como penúltima y antepenúltima, respectivamente.
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Las posiciones cambian cuanto se trata de comparar la media que se aporta por contribuyente como resultado de la declaración. En este punto se sitúa Catalunya primera, con 532 euros, lo que supone que la cantidad por declaraciones a pagar supera a la de aquellas que tienen derecho a devolución. De hecho, la catalana es una de las comunidades con los tipos del impuesto más elevados y eso afecta especialmente a las rentas anuales entre los 30.000 y los 45.000 euros, según el análisis que realiza anualmente el Registro de Econonistas Asesores Fiscales (REAF).
Tras Catalunya se sitúa la Comunidad de Madrid, uno de los territorios con los tipos más bajos, con 373 euros de media. Y es que en esta autonomía es en la que las rentas de 160.000 euros en adelante padecen una menor carga, según el mismo estudio del REAF. Las siguientes autonomías en la media de pago por IRPF como consecuencia de la declaración son la Comunitat Valenciana, con 267 euros; Galicia, con 97 euros; y Andalucía, como 75 euros. Las autonomías en las que la media es menor y, en concreto, con resultado negativo son Castilla-La Mancha, con -123 euros; Canarias, con -107 euros y Murcia, con -39 euros. El resultado medio es negativo porque la suma que da como resultado las declaraciones a pagar es inferior a la de aquellas que tienen derecho a devolución.
Según los datos de la Agencia Tributaria, las tres autonomías en las que la renta bruta sujeta a tributación fue superior son fueron la Comunidad de Madrid, con 38.315 euros; Catalunya, con 33.516; y Baleares, con 31.926. En los últimos puestos se situaron están Murcia, con 24.690; Andalucía, con 23.784; y Extremadura, con 21.294 euros.
Y los puestos en la clasificación vuelven a verse modificados cuando se trata de comparar el número de contribuyentes que declaran más de 601.000 euros anuales. En este apartado se sitúa primera la Comunidad de Madrid, con un total de 6.573 contribuyentes con este nivel de renta, un declarante más que en la campaña del 2021, según los datos de la Agencia Tributaria. En esta comunidad es la que menos gravadas están las rentas anuales de 160.000 euros en adelante.
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El siguiente territorio es Catalunya, con 3.365 declarantes de más de 601.000 euros; seguido de la Comunitat Valenciana, con 1.251; Andalucía, con 1.230; y Galicia, con 579. En todas ellas el número de declarantes de más de 601.000 euros era el mismo en 2021. En este apartado, Baleares supera a Galicia, con 587 contribuyentes que declaran a partir de esa cantidad. También es la comunidad en la que la media por declarante es de 1.043 euros porque la cantidad de las declaraciones con resultado a pagar supera con creces la de las que tienen derecho a devolución.
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